El horno de inducción, de hecho, permite mantener tiempos de ciclo muy contenidos aun pidiéndose perfiles térmicos particulares y no uniformes, según el tipo de trabajo mecánico al que la barra tiene que someterse.
La mecánica de movilización, almacenaje y automación permite que toda la línea se pueda controlar y totalmente y gestionar desde el púlpito de supervisión.
Considerada la necesidad de adaptar nuevas líneas de producto en procesos productivos preexistentes, a menudo es necesario adaptar el plano de máquina a la disponibilidad de lugar en la instalación.
Induction a menudo se propone cual proveedor de centros de trabajo llaves en mano, por consiguiente posee un equipo de proyecto capaz de estudiar y proponer las soluciones de instalación de compromiso, que permiten satisfacer las exigencias del cliente y, al mismo tiempo, mantener las características de calidad de sus propios productos.